lunes, 5 de agosto de 2013

Esclavos del pasado




Sacar la poesía de su propio fondo es pasado. Todo cuanto rodea al ser humano impuro es interés, mero interés. Mienten, utilizan los rostros de la parsimonia, el lenguaje de signos equivalentes, la humildad relativa de la falsedad. Interés y pasado.

Si algún día conoces a alguien que no funcione por el interés huye de él, también es mentira. Su falso interés está estudiado, es un experto en premeditación. Se suelen aconsejar por ancianos ignorantes y desprendidos de sí mismos. Mayores que no habitan en el mundo real, parásitos del recuerdo. Y el recuerdo es pasado. Y el pasado no existe.

La intuición es un grado de equivalencias. Nunca, salvo los indolentes, he conocido a nadie que armonice la lógica, la verdad y la intuición. Nuestro tiempo es un mundo de perros, de guardianes simples de la propia genética.

Conservan la memoria, tan solo la memoria. Y la memoria es como sacar a la poesía de su propio fondo. La memoria no es real, ni es verdadera, es esclava del pasado.