viernes, 29 de mayo de 2009

AL TASTE



Nunca segundas partes fueron buenas.
Si ya te lo decía, no era el turno.
Tanto clamar al cielo con venganza
para dar el portazo y decir
“Hasta siempre”.

Y no sé lo que pierdo todavía.
Yo tomo la chaqueta por los hombros,
enciendo un cigarrillo y limpio gafas.

Si ya te lo decía, has dicho tantas cosas
que he descubierto que la vida
dura igual que acaba el gusto.

32 comentarios:

Liliana G. dijo...

No sé si perdés algo o si ganás tranquilidad, porque por lo visto "ha dicho tantas cosas" que te abrumó con palabras...

Tampoco sé si "siempre", las segundas partes no son buenas, todo es aprendizaje en la vida, la cosa está en saber de que modo lo digerimos.

En la onda de tus poemas mártires, éste es el que más me gusta, el más contundente.

Un cariño, Javier.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Un fuerte abrazo Liliana.

Gracias por tus palabras amigas

Todo lo bueno dura lo que tiene que durar, y sí, estoy de acuerdo con tu "sesión de aprendizaje".

La digestión por naturaleza no la suelo tener buena, pero para eso están las ayudas.

Otro abrazo.

Juanma de la Torre dijo...

A veces es mejor un fin que una segunda parte, y una segunda parte es mejor que una una trilogía.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Y muchas veces, es mejor, amigo Juanma, cinco temporadas seguidas. O veinte.

Un abrazo y mil gracias.

Olga Bernad dijo...

El "ya te lo decía" debería estar prohibido, debería estar prohibido decirse cosas a veces, cuando ya ni se ve la verdad ni a lo mejor importa. "Y no sé lo que pierdo todavía". Hay saldos que sólo se valorán en un futuro impreciso. Y da un poco de miedo ¿no?
Un abrazo.

Julio dijo...

Pues, anda que las terceras...

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Sí, Olga. Me haces pensar. Debería estar prohibido.

Bueno, me has dado trabajo adicional.

Ya veremos, ya veremos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Julio, ¿y las cuartas?

José Miguel Ridao dijo...

Dicen que no hay quinto malo. Te quedan tres poemas, Javier, para ponerte optimista.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Tres? Nada más?

Optimista?

Quién dijo miedo?

Qué es la tristeza?

Jose Miguel, tú sí que sabes.

Lectores y amigos, lean los Haikus de Ridao, del día de hoy.

Un abrazo.

Juan Antonio González Romano dijo...

Y el gusto dura lo que dura dura...

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Juan Antonio, siempre pensando en lo mismo¡

El gusto dura, lo que dura un duro.

Un abrazo.

José Miguel Ridao dijo...

Muchas gracias, Javier, por tu recomendación. Eso que ha dicho Juan Antonio de lo que dura dura creo que se lo he leído antes, y alguien dio luego la cifra de 38 centímetros, palmo más palmo menos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

¡Anda ya!

Que estos, que acuden por estos lares mienten más que hablan, y presumen más que la Nancy.

Dime de qué presumes y te diré de qué careces.

Eso lo decía mi abuela, y es más verdad que el Cadiz está en SEGUNDA.

Un abrazote, salao.

Máster en nubes dijo...

Yo creo también que las segundas partes de casi todo no suelen ser buenas casi nunc a. Y que a qué empeñarse en general en nada, ni tampoco en nadie.

El tema quizás es que a veces no estás en una segunda parte de una primera, sino que sigues en la primera pero más cerca, mejor. Y ahí hay que seguir ahí, dando vueltas, pasando por donde ya crees que pasaste pero más cerca de alguien o de algo. Pero no sé, la verdad. Todo es un lío, o casi todo.

Alonso CM dijo...

Javier, me encanta el todo dialogado que empleas. Los dos últimos versos son geniales: la brevedad de la vida representada en el gusto momentáneo.

Un abrazo

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

je, es que todo es tan relativo.
besos y amor
je

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Hola Aurora, todo es un lío. Un gran lío como dices, mujer.

No podemos empeñarnos en nada, por que nada es todo.

Un fuerte abrazo NY.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Miradme por tus palabras.

Recibe un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Y tanto Sede, y tanto.

Relativo + Real = Dos R

Un abrazo.

MiLaGroS dijo...

Me parece muy duro el poema. Solamente tediré una cosa los portazos suelen ser de pronto después el amor vuelve a abrir las puertas, si lo hubo, y hay nuevas formas de afecto que no tienen que ser segundas partes sino una continuación distinta. Yo creí que en estos temas los hombres érais más duros ja, ja, ja. Cuando vea a un hombre con la chaqueta sobre los hombros, ponerse las gafas y encenderse un
cigarro entenderé que llorá por amor. Un abrazo y ánimo. milagros

Taller Literario Kapasulino dijo...

Javier... me encanto tu poema... creo que es uno de los mas significativos que has escrito desde que te leo...
Me imagine la historia, me imagine una pareja que vuelve, y no funciona, me imagine al personaje que describes fumando el cigarrillo.
Lo vi todo!
Te felicito javier, me has encantado con esta poesia!

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Milagros.

Un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Carla. Eres muy visual.

Gracias por tus palabras.

Un fuerte abrazo.

Rosna dijo...

Tan breve es este pasar por la vida , lo único que importa es el cambio definitivo , lo demás no tiene la menor importancia .
Un abrazo apretadito
Le dejo ... pero no me voy ...
Rosna
Rosana Gabriela Yuriko

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Yuriko.

He visitado tu isla, y agradecido a Silvio San.

Mil gracias.

Y no te vayas del todo. Si es para bien, bueno sea.

Recibe un fuerte abrazo con cariño.

¡Hasta siempre!

Marisa Peña dijo...

me gusta lo de tomar la chaqueta por los hombros,encender un cigarrillo y limpiarse las gafas...Sencillos gestos para vivir momentos complicados.Un beso

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Marisa.

Nada es complicado. No existe el momento complicado, sólo la Literatura.

Un abrazo.

Amadeo Romero dijo...

Te he dejado un regalo en mi casa.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Lo he visto cabroncete, lo he visto.

Gracias de todos modos.

Mery dijo...

Ya está la terna andaluza hablando de lo único.
Haz poemas para ésto, ay Señor...

Un abrazo, sureños

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Ya estamos Mery, ya estamos.

Un fuerte abrazo.