jueves, 1 de octubre de 2009

Ejercicios de Irreverencia



Y cuando tú dominas todas las condiciones
llueve, aunque debe ser hora de que vayas dejando
esa letra pequeña. ¿Recuerdas? Nos miramos las manos,
nunca fueron los ojos los que dijeron basta.

Es ahora otro tiempo y no estamos de acuerdo.
Será porque el amor, como el tren, regresa de las aguas
y hoy he cogido un taxi, frena la luz y existe este poema
aunque no te conozco y sigues preguntando.

Vendo mi corazón si alguien lo quiere,
está de saldo siempre, y en lote regalo
un pañuelo, tres versos y un horizonte inútil
de pérdidas pulidas y libros por el suelo.

Dios, si debes decir algo que sea pronto
que también nos cansamos los que tenemos hambre.

29 comentarios:

Anónimo dijo...

Then, Sir, you like compliments, don't you? So, here we go.

Those books on the floor,
those three verses,
the useless horizon,
even the heart on sale
so moving,
so sad
so ...
so ...
Vaya morro que te gastas, moreno.
In short: you're a real irreverent

María Queen of Scots (Scotch, hic, in this moment, hic again, beg you perdon, Sir)

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Do not pass, do not pass...

Simply you leave me with the honey in the lips.

Care with 5 º!

Thank you majesty.

To your feet always.

Joaquín dijo...

Bienaventurados los irreverentes,
porque ellos beberán
Mexican Mule
(con Dios)

.../...

Jesús Cotta Lobato dijo...

Estupendo poema, pero qué maravillosos esos dos últimos versos.

mangeles dijo...

No dice nada, ¡nunca dice nada.¡

¿El pañuelo está limpio y es de seda?...por si acaso...

Besos de casi viernes.

Dyhego dijo...

JAVIER:
Te compro los versos, el corazón y el horizonte.
Te invito a un "mexican mule" por tu cumple (soy unos cuantos días mayor que tú).
Me ha gustado el poema, pero no veo la irreverencia.
Salu2.

Capitán dijo...

Javier, ¿Y qué harías sin corazón?, ¿serías capaz de escribir un poema sin corazón?

Ahí te dejo el reto, con éste el nivel lo has puesto muy alto, ¿y sin corazón, dónde llgarías?.

Un abrazo

Vicky dijo...

He llegado a tiempo para verte escribir poemas. Me a gustado.


Un saludo cordial.

Alonso CM dijo...

Subrayo a Cotta, magnífico versos finales.
La vida como lucha, como busca, como espera.

Olga Bernad dijo...

El poema te lleva de la mano a una sensación de desencanto aceptado finalmente, al corazón de saldo que se vende al mejor postor porque en el fondo prefiere seguir entregándose, con un cansancio que aún quiere esperar un poco más para rendirse. Tal vez porque, despues de todo, "... existe este poema/ aunque no te conozco y sigues preguntando".

Y sí: ya queda menos;-)

Liliana G. dijo...

¡Oh! Eso fue lo que pensé al leer tu poema, claro que la admiración se potencia cuando uno toma conciencia del contenido que subyace escondido en los versos...

Así que te dedico unos cuantos ¡Oh! de admiración, ni siquiera su languidez consigue empañarlo. (Ese "Vendo mi corazón" me estruja el alma)

Besos, Javier.

Juan Antonio González Romano dijo...

Coincido -cómo no hacerlo- con Jesús y con Miradme: muy buenos los dos últimos versos.
Pero el problema no es si debe o no decir (que sí, debería), si no si quiere decir algo. Y, ay, no quiere, el muy...

Abrazos.

Anónimo dijo...

Y los que tenemos sed también nos cansamos. ¿Un mexican mule por ahí? Mira que cojo el ave... O lo coges tú, que aquí no nos conoce ni Dios...

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Con Dios Joaquín, con Dios.

Gracias amigo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Mangeles, de seda no, de hilo.

Un abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

La irreverencia la lleva el que lo ha escrito Dyhego.

Un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Capitán, uno y mil.

Ya lo verás un día de estos.

Saludos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias a ti Vicky, un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Como infierno Miradme, y como cielo.

Gracias.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Olga, el mejor postor siempre habla, y siempre es el mismo.

¡Ese Luzbel!

Pd. Mucho menos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Un abrazo muy fuerte Liliana.

Gracias.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Juan Antonio, ¡y cómo va a querer!

Otro gran abrazo y hasta mañana.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Lo tomo yo Octavio, lo tomo yo, que hay muchos amigos por tus tierras, y buen vino, marisco y...

Daniel García dijo...

Enhorabuena por tu blog.Me he llevado una sorpresa.
Me gustaria que echases un vistazo al mio.
www.danielgarciapinturas.blogspot.com
Por cierto, trabajé hace unos años en ecoem, repartiendo,no se si te acuerdas.
Un saludo

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Daniel.

Te haré una visita.

Un abrazo.

Julio dijo...

Buen poema, muy bueno. La irreverencia es una de las semillas del arte, Javi.

Paloma Corrales dijo...

A mí me habla de desamor en lugar de irreverencia.
Dicen que un poema no es sólo de quien lo escribe, también lo es un poco de que quien lo lee...

Me gustó, en especial la primera estrofa.

Besos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Un abrazo Julio.

Tus palabras son una reverencia.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Paloma.

El desamor provoca irreverencia.

Gracias.