lunes, 7 de septiembre de 2009

Aprendiendo a morir



Ya decía Platón que aprendiendo a morir se vive mejor. Pero resulta que todos queremos vivir y nunca aprendemos a morir. Y mucho menos en paz.


16 comentarios:

Máximo Silencio dijo...

Aceptar que somos mortales... Eso no es algo que tenga pensado hacer el hombre de hoy...

Saludos

Ignacio dijo...

Creemos estar preparados para todo y siempre nos sorprende la vida porque jamas nospreparamos a lo sorprendente

Liliana G. dijo...

¡Nada más lógico! Es el mismísimo instinto de supervivencia, metafórico o no, el que nunca está preparado para la partida definitiva (afortunadamente) y eso pesa a la hora de poner en juego nuestra resiliencia.

Aceptar una frase célebre sólo porque fue dicha por una "celebridad", me parece una hábil zancadilla de la historia para apropiarse de nuestro libre albedrío...

Besos Javier.

(Yo suprimí el comentario anterior, tenía un error espantoso. Perdón)

Juanma dijo...

Yo toco madera porque la muerte, cuando me llegue, me a cortar todo el punto. Para qué voy a decir que no, si es que sí...

Un abrazo, querido Javier.

Dyhego dijo...

No creo que nadie se prepare para la muerte porque queremos tenerla cuanto más lejos mejor.
Salu2 para que vivas mucho, mucho.

Vicky Cateura dijo...

Aprovecharé también una cita de Charles Chaplin como comentario:

"Hay una cosa tan inevitable como la muerte: la vida. Nuestra vida es nuestra historia y el tiempo es el mejor autor; siempre encuentra un final perfecto.
Ninguno pasamos de ser meros aficionados. La vida es tan corta que no da para más"

Un abrazo

Juan Antonio González Romano dijo...

"Y mucho menos en paz", diría yo al final. Así es, qué difícil. Un abrazo, Javier.

Julio dijo...

Memento mori: vita magna

Jesús Cotta Lobato dijo...

Pues la verdad es que yo no estoy de acuerdo con Platón. A morir no se puede aprender, salvo cuando uno sabe qué día va a morir. Siempre me ha sorprendido que los condenados a muerte o al paredón vayan con su propio pie sin cagarse en los pantalones. Estaban preparados. Un abrazo.

L.N.J. dijo...

Hola Javier, siempre con la muerte en los talones, pero dichosos los que llegamos a esta vida. La paz, qué idea tan bonita, pero se vende lo contrario y no sé si se llega a comprar, ¿ seremos masoquistas ?.

Un beso.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Buenas noches a todos y muchas gracias.

Siempre con la muerte, porque es parte de la vida, de nuestra vida.

Un fuerte abrazo a todos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Profe Romano, su corrección es arte, y ha sido tenida en cuenta.

Mil gracias, con todo mi cariño.

Capitán dijo...

Las vírgenes prudentes estuvieron listas, lástima que no seamos vírgenes ni prudentes, ¿o no es una lástima?

Un abrazo

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Y tanto Capitán, y tanto.

Saludos.

Mery dijo...

¿Aprender a morir?
Para eso tendríamos que ser dioses; los humanos no estamos programados para ello.
Una quimera, vamos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Y dices bien Mery.