Me han dicho que no diga burradas. Que es una cosa muy seria. Que hay muchos implicados, y que esto no es para tomarlo a broma. Y me lo ha dicho un galeno. Yo le he respondido que desde luego, que cuando se escribe se escribe, y aunque le pese la pesa, que se pese y que no pase.
Todos poseemos en poco o en parte un trastorno bipolar. En nuestros actos, en nuestras relaciones, en nuestro propio Cuaderno. A veces estamos arriba y otras tantas abajo.
Debo reconocer que cuando escuché lo del trastorno pensé en otros muchos semejantes, y nunca llegué a imaginar que un maníaco-depresivo iba a ser en la actualidad un bipolar. Lo de la bifurcación viene de la informática, de la geografía. Pero ambos son dos. Ambos son par.
En la Blogaduría dudamos. Sí o no. Arriba o abajo. Escribo o no escribo. Comento o paso de largo. Bi. Furcación polar. Pero la imaginación nos supera, y todos no somos iguales. ¿Semejantes? Yo diría tan distintos. Tan “bi”.
Todos poseemos en poco o en parte un trastorno bipolar. En nuestros actos, en nuestras relaciones, en nuestro propio Cuaderno. A veces estamos arriba y otras tantas abajo.
Debo reconocer que cuando escuché lo del trastorno pensé en otros muchos semejantes, y nunca llegué a imaginar que un maníaco-depresivo iba a ser en la actualidad un bipolar. Lo de la bifurcación viene de la informática, de la geografía. Pero ambos son dos. Ambos son par.
En la Blogaduría dudamos. Sí o no. Arriba o abajo. Escribo o no escribo. Comento o paso de largo. Bi. Furcación polar. Pero la imaginación nos supera, y todos no somos iguales. ¿Semejantes? Yo diría tan distintos. Tan “bi”.
30 comentarios:
Es verdad! todos tenemos nuestro lado "Bi" y es difícil entendernos...
un beso
Estimado Don Javier en un tema tan serio me ha arrancado una buena carcajada,en la Blogaduría dudamos,por supuesto,me decía le comento no le comento,la parte de mi trastorno bipolar me dice comenta,que eres la primera o la segunda,total,entenderá mi comentario, será benevolente, cualquier trastorno es un atenuante.
Reciba un abrazo.
A mí me pone triste.
En la mayoría de los blogs que sigo, siempre comento, aunque sea para decir "hola" aquí estoy, y te he leído.
Pero hay algunos que sigo, en los que no comento. Suelen ser de poesía. Hacer comentarios a poesías no me gusta. ¿Qué digo? Ohhh que bella, que maravillosa...a la tercera ya es reiterativo... Si supiera de poesía y pudiera hablar de un verso bien hecho, o de una rima perfecta...pero sin saber¡¡¡...
En fin, que también soy BI jejeje.. casi siempre comento, para que mis amigos blogueros sepan que estoy "aquí"...y en algunos no comento, pero creo que ellos saben que también estoy "allí".
Besos de martes, ni te cases ni te embarques.
Se disfraza en palabrería lo que es muchas veces la hipocresia; y se le da rango de enfermedad a todo para poder sublimar: el enfermo su enfermedad, el galeno su conocimiento que suele ser sesgado y carente: pero si le dan importancia a "la enfermedad" se dan importancia a ellos mismos.
Sea cual sea la patología, mucha gente ha caminado con ella desde el neolítico al menos, solo que sin darse tanta importancia.
Ahora como justificacion social habla de patologias: tiene adiccion al blog, a la poesia: casualmente no se habla de adiccion al dinero.
Y por si esto no era bastante ridiculo, rizan el rizo con las terapias:
Cromoterapia:
se curan vistiendose de otros colores ¡y la gente se lo cree!
Eso si machacan a los católicos por creer en Dios: ellos, rendidos al horoscopo y la horoscopoterapia.
El blog es como el ying y el yang.
Un abrazo.
Hamlet no tendría blog.
Siempre dudamos, Javier...Y sufrimos, y disfrutamos, y cambiamos de opinión, y juzgamos, y nos equivocamos.El blog es el espejo de nuestras incertidumbres, de nuestras grandezas y de nuestras miserias.
Un abrazo
Vaya, llevo un buen rato intentado entender (con mi hijo) aquello de los billones, millardas... Y all final resulta que son bi-llardas.
Sigo dudando, Javier.
Un abrazo bifurcado.
Coincido.
En la blogaduría dudamos como en la vida, pues mal que nos pese y no lo queramos reconocer, la blogaduría ya es parte de ella.
¿Que es apenas una parte? Sí, lo es.
¿Que esa parte no nos representa? Pues nuestro reflejo en el espejo del blog no nos deja mentir.
Celebro todo lo "bi", pues dentro suyo se apiña lo humano y por fuera la incertidumbre del ser...
Un fuerte abrazo Javier.
Creo siceramente que bipolares somos todos. Lo malo es cuando nos lo dicen.
Un abrazo, Javier.
Perdona, Javier, ¿bipolar dices? pues no lo entiendo, yo no hago más que ver mesura y contención en la blogosfera, fairplay, discreción, flema hasta británica, una ligera melancolía, muy ligera, o un contento casi propio del ilustrado, todo muy medido, contemplación, ligera brisa, todo en calma, capitán.
Ahora bien, ¿y los que tienen dos estados de ánimo posibles, sólo 2, como el estado de contento extremo o de enfado-cabreo extremo? ¿Son estos también bipolares de esos que dices que dicen?
Un abrazo doble, just in case, sir
Aurora
Hasta tripolar, Javier, hasta tripolar, pero no calles, nada es tan serio.
Un abrazo
De poetas y locos todos tenemos un poco. Me ha hecho reir lo de tripolar. Un abrazo
Y es verdad Siab.
Un abrazo.
Tienes mucho arte América, pero por favor, el "don" lo dejamos para los mayores.
Un fuerte abrazo y mil gracias.
Y a mí, Olga, y a mí.
Un fuerte abrazo mangeles, y mil gracias.
Lo malo Ignacio es que se lo creen, y lo seguirán creyendo.
Un abrazo.
Un poquito de maría, José María???
No Joaquín, tendría un Cuaderno rosa.
Y así es Marisa, y así es.
Gracias.
Miradme, y tri-llardas.
Un abrazo bi-sociado.
Otro para ti.
La vida en sí, también es "vi".
O cuando no lo queremos creer, Julio.
Yo soy bi-cervecero.
Aurora, detrás de la mesura, siempre está la espesura.
Un abrazo.
Y ¿tú lo dices, Capitán?
¿Nos callamos, o nos desnudamos?
Un abrazo.
Gracias Milagros, es el Capitán, que tiene arte.
Saludos.
Vamos, lo que de toda la vida se ha llamado un "estoy que no soy yo."
Pero BI queda mas corto y mas IN.
Rompedor, Javier.
Un beso
Gracias Mery.
Mucho más corto y más IN, como dices.
Un abrazo.
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