martes, 17 de noviembre de 2009

Perdiendo el tiempo



Una vez tuvo a un amigo, confiaba en él, el grado de compenetración los acercaba. Pero el amigo le engañó. Aprovechó una sutileza para estafarlo.

Lo denunció, el mal mayor no tenía importancia. El mal moral era el problema.

Y así pasaron los días. La amistad había muerto para siempre. ¿La amistad?

Salvo que alguien diga una vez que nunca podrás ser amigo de otro, todo es infinitamente predecible. Y a partir de ese momento, nada deja de tener sentido.

El todo o la nada. La vida o el nacimiento. La muerte o la falsedad.

Ya ha perdido los argumentos, es una foto en blanco y negro por la calle. No lleva carrito. Está asustado. Vive perdiendo el tiempo. No escucha.


22 comentarios:

oliver sotos gonzález dijo...

Ya contarás cómo tener el tiempo para luego perderlo. Alucinante.

mangeles dijo...

Felipe González dijo que "jamás se tomaría un café con Aznar". ¡Vamos, que ni aledaños de bar".

Las traiciones cuanto duelen.Amor, desamor....

Mucho que pensar.

Besos

maile dijo...

Una de cal y otra de arena... la vida puede ser muy cruel y de vez encuando te quita, sin rodeos y sin ruborizarse, hermosos tesoros y aunque procures tener la cabeza bien amueblada, siempre te deja alguna habitación vacía. La decepción se hace fuerte allí y es difícil volver a amueblarla.
¿Amigos? haberlos haylos, pero los de verdad son difíciles de encontrar y más aún de conservar.
Que tenga un buen día don Javier.

Olga Bernad dijo...

Pocas cosas duelen tanto como la traición de alguien a quien quieres, pero si eso nos desencanta y nos coloca "de vuelta", en ese momento nos hemos vuelto viejos.
Con todos sus riesgos, nada como la amistad y la confianza en otro. Es para fuertes, eso sí.
Buen día, Javier.

Dyhego dijo...

JAVIER:
Lo mejor es no esperar nada ni de los amigos ni de nadie; así, todo lo bueno que venga será bienvenido.
No hay que abusar de la amistad ni pedir nada si uno no está dispuesto a dar eso mismo en situación similar.
En una película de Almodóvar, Marisa Paredes dice que siempre ha creído en la generosidad de los desconocidos. Yo también. Pero un desconocido te puede hacer uno, dos o incluso tres favores. Más, es pasarse de la raya.
Salu2 desinteresados.

Capitán dijo...

La amistad es algo que se da, y sin esperar nada a cambio. Muere porque uno decide dejar de darla.

Un abrazo

Marisa Peña dijo...

Me gusta confiar en los demás, si luego recibo una puñalada trapera me lamo las heridas y sigo adelante. la traición duele mucho pero nos permite reconocer a los de verdad en las penurias...un abrazo

Mery dijo...

Tener un amigo es tener un tesoro.
Y haberlos, haylos.
Seguro que tu eres de ellos...
Un beso

Juanma dijo...

Le robo sus palabras a Marisa, pienso como ella...nunca aprenderemos. Ni falta que nos hace.

Un cálido abrazo, Javier.

Liliana G. dijo...

La amistad es incondicional, se da o no, pero nunca a medias tintas. Alguien que te estafa en tu buena fe nunca ha sido tu amigo, te ha engañado desde un principio.
Tampoco has perdido el tiempo, has aprendido mucho... (creo)

Besazos, Javier.

mirambella dijo...

Que duros son tus escritos. Que te decepcionen, que un amigo o alguien que crías que lo era no lo sea, duele y mucho. Pero a pesar de las tortas que me dado en la vida, quiero pensar que aun vale la pena la amistad, y que hay gente en la que sí se puede confiar. Besos.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Oliver, es más fácil de lo que crees.

Un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Mangeles, pero Felipe era un cachondo, y además gran persona.

Un abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Tiene mucha razón Maile, y le diría que toda.

Mil gracias.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Olga, pero no soy tan fuerte, la verdad.

Gracias.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Un fuerte abrazo desinteresado, Diego.

Gracias.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Simple pero práctico Capitán.

Un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Pero es duro Marisa, muy duro.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Gracias Mery.

Un fuerte abrazo.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Otro para ti Juanma.

Gracias.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Un fuerte abrazo Liliana.

Gracias amiga.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Sí existen Mirambella, las menos pero existen.

Gracias.