miércoles, 28 de septiembre de 2011

62 (Sesenta y dos)



Es tu boca el ímpetu de la rebeldía. Acariciar tu pelo y tu sonrisa mientras dejas de lado la configuración de sentirte mujer e intentar descifrar todos los actos. Efímero es aquello que muere en un instante. El verso de Virgilio vive en las sombras. El de Eliot también. Si pudieras leer más de la cuenta los proyectos son vanos. Te he invitado a mi casa. Hace frío en la piscina pero el tiempo quiere evitar todas las nubes.

Tengo que entrar en el laberinto. Las vueltas las dará Raquel. O Susana, o Loreto. Todas, al fin y al cabo, poetas de la vida. Los miles de días grises han llegado.