MI
querido amigo:
Para mí sus palabras valen más que esas que provienen del centro del bosque. Porque usted es sincero, coherente y, además, admira lo puro, lo sublime y lo sagrado.
Dice Juan Carlos A. que hay que recortar a la Corona en España. Y le repito lo mismo que le indiqué hace unos meses, que la Corona no debe existir en España. Ni es pura, ni sublime, ni sagrada. Y esto es sincero y coherente.
Y es que toda esa vida es una máscara, un gran artificio de mierda y porquería. Como nuestra Corona, la vuestra.
Me arrepiento de todo cuanto escribo y hoy alguien me ha recordado la frase de Juan Ramón. Tan acertada, tan venida al dedo índice, ese que no lleva anillos. Nunca fueron perdidos ni simulados, como lo es la presencia de príncipes y princesas.
En asuntos del alma nunca le fallaré, se lo aseguro.