SIEMPRE se nace para estar dentro. Aunque algunos se empeñen
en alojarse fuera, estamos dentro, dentro del círculo.
Dentro existen los opuestos, la tierra mojada y las visitas de los pájaros. Entre la maleza y la humedad acompañan las sombras. Suena la música de Francesco Araja. Es una ópera.
Volcar la vida a la literatura implica percepción, competencia, instintos de desconcierto y voluntad.
La poesía es una nube de desarrollo vertical. El círculo es finito pero perpendicular a los meridianos. Así se crece y se disfruta en la parte interior, nunca salvo o excepto.
Los contrarios se dejan ver al mediodía. Cuando la luz del sol está en su punto más álgido. Aquello que divide y eterniza.
El círculo es el centro. La verdad y la mentira. La justicia y lo cierto.
Preparo una carta con todos los desvíos. El destino es la búsqueda, el sur geográfico. Se quedarán las cosas en las habitaciones. Hay maneras de ser, destrezas y fundamentos. Hay tentaciones de franquear el sobre o destruirlo.
Dentro se hace tarde y tengo frío. En la naturaleza todos somos rechazo, admisión y silencio.