La diferencia entre estilo y clase existe. Por encima de la amistad está la calidad. El agradecimiento es dignidad. Lo mediocre abunda y confunde al pueblo. El lector no entiende. No quiere entender, ni se deja aconsejar. Los suplementos literarios de este país son pésimos y los críticos indecentes e incultos. Si te dejas llevar por la amistad acabarás como Stanley, enterrado.
La poesía es exploración. Constantes misiones en busca de una única verdad: la exclusiva realidad del silencio.
Y si algún día, no llegas al sueño, o deseas olvidar el ruido que tanto molesta, no olvides: ya no seremos nunca extraños.