miércoles, 14 de diciembre de 2011



NO sé vivir el presente, pero a diferencia de JRJ mi vida es ajena a la esperanza. Es la veracidad. Ni puedo ni deseo. Tampoco quiero. Vivo de los recuerdos: el anillo, la azotea, la boda, los versos de Leopardi, el sillón frente al cuadro de mi buena Vespucci, Venus alegoría, Thomas Gainsborough, el dieciocho inglés, toda Italia, Sevilla.

Las sombras que visitan en la noche suelen dejar encima de la mesa un poco de mantillo y una llave. El mecanismo para entrar en el laberinto tiene cuatro dientes. Estoy vacío. Los sueños ya no cumplen su objetivo. Me pierdes. Me rindo. Pero nunca te olvido.

Preguntaré a los astros si esta vida prosigue. No la quiero. Es la veracidad. Hoy vuelve a hacerse tarde. Tengo frío. Mucho frío.

Es el amor lo que destruye al hombre. El poeta niega, no condiciona. El sorbo de whisky al vaso de cristal sabe a mantillo. No vivo el presente, ni tengo esperanza alguna.