lunes, 27 de junio de 2011

Ochenta y dos



Defender lo probable suele ser inaudito. Lo seguro no es cierto, la verdad nos confunde. Un saltamontes joven ha caído en la piscina. Movía sus patitas con la desesperación con la que el amigo defiende al mal poeta. El efecto del cloro iba llegando al alma. Le ha quemado las manos.

El mal poeta defiende. Y el poeta defiende al mal poeta. ¿O al mal amigo? Mal amigo poeta. ¿O mal poeta amigo? Defender lo improbable suele llevar al caos.

Lees lo que quieres leer. Interpretas lo que deseas interpretar. La premeditación. El joven saltamontes agoniza en el agua.

La belleza siempre es verdad. Y no confunde, ni siquiera es probable. Simplemente es. La belleza es palabra, con todo su misterio.

Los tamarindos en su copa van cambiando el color.