miércoles, 8 de mayo de 2013

La vida tan despacio




PERSIO (Aulo Persio Flaco) escribió en sus seis Sátiras un reflejo social casi contemporáneo. La primera de sus sátiras, tras su lectura, bien podría reflejar la situación de la poesía actual. Leo, escucho a Isabel22 con su mecánica voz y sonrío. Vienen a la cabeza tantos nombres y apellidos actuales, tantos no poetas que, como cerdos, tiemblan y se entretienen con la ignorancia.

Persio debía venir a visitarme. Le recibiré en compañía de Quevedo. Tomaremos un MM en el porche con los pájaros.

Eco sonoro, silencio, como el día que conocí a dios y se refleja en el comienzo de las inclinaciones. ¡Hay tanto que pulir! ¡Hay tanto que leer! La avaricia dice ¡Levántate! Pero la avaricia se rompe como la vanidad de aquellos que se creen el propio dios.

Yo te vi primero, es cierto, la fuente de energía representa la esencia, la vida tan despacio en silencio y soledad.

Acabo de recibir la nueva casita para pájaros, es verde. La toco, la desnudo, dudo de su simpleza. Intento entrar pero no entro. Lamento las distancias, las dimensiones, y hasta la alegría.

Sally escribe a Charlie Brown. Charlie responde a Sally. Sally con la pelirroja Heather, la del poema. Joder con Persio y sus tratados.

La vida tan despacio, los pasitos lentamente, acompañando la cadera con el bastón y repitiendo el verso de Claudio como murmullo. Parra salta de pronto y ¡Artefacto! Juan Ramón sonríe. Leopardi agacha la cabeza con humildad. Rilke abre los ojos. ¡Qué grande es la Literatura! La auténtica Literatura, no lo que se escribe hoy día.